martes, 7 de junio de 2011

¡Las Nuevas LuisVenturas De Falcon Ford, Detective De Google (Volumen III)!

¿Qué hacer ahora? Las pistas me habían llevado a un callejón que parecía tener salida, pero de esas salidas que cuando te acercás a ellas confirmás que se trata nada más de un vagabundo que toma la forma de una salida por los efectos de el vino de cartón que has bebido a toda velocidad tras arrebatárselo a un vagabundo que aún no es inmediatamente confundible con una puerta. ¿A dónde ir? No lo sabía y los tipos de vomito no me iban a ayudar a saberlo, tenía una única y solitaria pista: mi vieja pista de Hot Wheels, que siempre llevo conmigo para recordar los soles de la infancia, abajo en Louisiana, a sólo una milla de Texarcana, en los viejos campos de algodón atrás del rancho. Además tenía la foto que me exhibía a mí con mi Kostenlos, el Chapulín y un cuarto hombre.

Era menester encontrar al Chapulín y al otro hombre, pero era claro que no iba a lograrlo sólo. Si algo he aprendido de mi colega publicar comentario entrada (0) francisco de narvaez, que murió por intentar sin ningún tipo de apoyo desbaratar a la mafia de Chicago irrumpiendo en una reunión de jefes agitando una espátula al grito de "Love is the answer", es eso. Sin embargo, mis años en la Policía me habían legado incontables colegas que podrían echarme un piolín: Bill Beluga (NYPD), Uwe Boll (LAPD), "The B.G." Strongs (PPSOE), Jack Daniels (TENEME), Geddy Lee (RUSH), y la lista continúa.

En este caso en particular me decidí llamar a mi viejo colega irlandés en la policía de Boston, Mick McAya. No lo veía desde lo de ALVERJAS, pero sabía que valía la pena. A pesar de su debilidad por el alcohol, las peleas callejeras, el pporno anal culo cartuchera brasileñas y todo aquello a lo que en general se lo puede rotular como "ilegal", era un gran policía y un crack a la hora de encontrar personas (y de consumir la antedicha sustancia). Así fue que esperé un día fuera de la central y salí a su encuentro:

"Mick, viejo bastardo, ¿Cómo te encuentras?"

"Ford! Creí que habías muerto! No hablaba contigo desde lo de ALVERJAS... ¡Qué tiempos eh! Recuerdas cuando fuimos a carta buzon correos a arrestar a las prostitutas que ayudaban a otras prostitutas a traer prostitutas desde otros países para formar una red de prostitución para satisfacer la demanda lésbica de prostitutas de otras prostitutas?"

"¡Qué tiempos aquellos!" respondí riendo sin tener idea de qué estaba hablando ni de quién o qué era piratacumbiero.com.ar. Mick había pasado trece años trabajando en una sola y continuada borrachera, así que no me extraña que recuerde los sucesos de una forma un tanto extraña. Recuerdo que se vanagloriaba de haber pasado seis años completamente sobrio, hasta llegar a su séptimo cumpleaños. Por otro lado yo pasé esos mismos años más duro que un diamante obstinado, así que esos las imágenes de esos tiempos se aparecen ante mi memoria como el ocasional movimiento de manchones (cuando alguien usaba una remera colorida) y algún que otro vomito de cerevelo. Éramos una gran dupla.

"¿De qué se trata esta vez, Ford? ¿Drogas? ¿peto el feto gadorcha?"

"Nada de eso, Mick. Necesito que utilices tus recursos para identificar a la persona disfrazada de Chapulín en esta foto, y también a esta otra misteriosa cuarta persona", le dije, entregándole la foto que en ningún momento relaté haberme llevado de la casa de Kostenlos, pero que ahora tenía gracias a la acción de este mismo párrafo sobre la trama.

McAya la miró como mirarías un ilustrativo sobre el dia del estudiante, me dijo que esperara y volvió a entrar a la central. Lo esperé mientras me plateaba interrogantes como "¿Cual es el sentido de vivir?", "¿Podrá Caruso salvar a Quilmes del descenso?" y "¿de que nos protege una casa?". Mick salió a los quince minutos, aunque mi reloj me asegurara que había tardado en realidad cuatro horas y media.

"Listo. El sujeto vestido de Chapulín responde al nombre de Ronco Pistacho, alias "Ritchie Valens", alias "El Chapulín Verde". Vinculado a varios casos de tráfico de drogas, tráfico de armas y sindrome uremico hemolitico grafico ilustrativo. Arrestado en 1989 por posesión de historietas porno ilustradas, fue absuelto por un jurado compuesto enteramente por petarditas chupando pijas. Sin embargo no estaba al tanto de ello y se dio la fuga. Está prófugo desde entonces. Uno de sus mayores vicios es disfrazarse de Chapulín para tentar a los niños pequeños a subirse a su furgoneta, una vez allí, les recita poemas de Bukowski hasta que pierden el conocimiento, y luego los lanza del coche en movimiento al grito de ""committee secretariats" traduccion". Es un hombre extraño."

"Genial. ¿Cómo puedo dar con él?"

"¿Si supiera eso, no estaría prófugo, verdad?" me respondió con un tono idéntico al que yo sabía utilizaba desde hace años para la extorsion para tener sexo con mi cuñada videos gratis hentai.

"¡Demonios Hauches! ¿No puedes darme nada sobre él, Mick?"

"Pues... Deberías empezar a averiguar si han avistado algún hombre disfrazado del Chapulín en alguna plaza de las cercanías. Su vicio lo condena. Yo te recomendaría que comenzaras por "mar del plata" bicho taladro."

"Eso haré. hoy viernes tres de agosto a las ocho de la mañana sarpamos al puerto de palos. ¿Alguna info sobre el otro hombre?"

"Nada, no existe para las fuerzas policiales. Oye-" me dijo tomándome el brazo con el brazo, no mi brazo, sino el suyo, es decir, empleó el antedicho para tomar el primero, "Sé adonde va todo esto. Kostenlos. El crimen de consultorios cipas mar del plata. El Chapulín. el bahiano jojoy. Sigues obsesionado con la búsqueda de programa de television americano que causo lala despedida del l. Déjalo ya, Ford. Ese caso está cerrado hace años. Pasó al olvido, como la gripe A o el campeonato de Argentinos. Déjalo ir, Ford."

"¡Jamás!" grité respondiendo a un transeúnte que frenó para pedirme que le nombrara una organización yihadista palestina. Me volví a McAya y le respondí: "No puedo, Mick. Debo saber la verdad. Debo encontrarlo. No puedo distraerme con discusiones de pedofilia. No puedo detenerme. Pero te agradezco todo lo que has hecho por mí, Mick. ¿De donde sacas toda la información"

"Oh, basta con buscar entre las piernas de mi sobrinita" me dijo con suficiencia. "Pues te deseo lo mejor, Ford. ¿Necesitas algo más?"

"Bueno, quizá también puedas ayudarme con un pequeño problema doméstico: ¿que debo hechar en el pasto para que los perros de otras parte no se caguen?"

Se fue sin responder dejándome sólo en la noche helada. Mirando al horizonte recordé la cara del hombre a quien buscaba y la fotografía se comprimió en mi puño que apretaba con la ira contenida de una herida abierta. Al abrir mi puño nuevamente comprobé que no se trataba de la fotografía sino de mi último dólar.

Puta madre.

Esta página sigue en Internet gracias y sólo gracias a la infinita misericordia de NUESTRO HOSTING: